LA HISTORIA DEL VIEJITO SENTADO EN LA ENTRADA DEL PUEBLO
Cuenta la historia que en la entrada de un tranquilo pueblecito había un anciano sentado en un banco . Como ya estaba retirado y era el hombre más viejo del poblado , pasaba el día sentado , saludando a todo el que entraba y salía del pueblecito. Un día llegó un forastero , se le acercó y luego de saludar preguntó : " Señor , pienso quedarme a vivir en esta ciudad , ¿ cómo es la gente de este pueblo ? . " Primero dígame usted como era la gente del pueblo donde usted vivia ", le contestó el anciano . " la gente del pueblo donde yo vivia era chismosa , intrigante , amargados , siempre estaban de mal humor , por eso decidí mudarme ". " Ah , caray , que casualidad , la gente de este pueblo es así mismo , chismosa , amargada e intrigante " , explicó el anciano. A los pocos minutos estaba entrando a la ciudad otro hombre interesado en vivir en el poblado , quien al ver al anciano se le acercó y le hizo la misma pregunta : ¿ Cómo es la gente de este pueblo ? . " Antes de contestarle , dígame como era la gente de la ciudad en que usted vivia ?. " La gente del pueblo donde vivia era servicial , alegre , trabajadora , honrada , amigable y muy alegre ". " ! Así mismo es la gente de esta ciudad " , dijo el anciano. Otro hombre que disimuladamente estaba cerca y escuchando las conversaciones , le preguntó al anciano : ¿ Cómo es posible que usted le de dos respuestas totalmente opuestas , diferentes , a una misma pregunta ?. " Lo que ocurre es que tanto la amargura , las frustraciones , como así como la alegria y el optimismo , son cargas personales y comportamientos que la gente tiene y que llevan a cualquier parte del mundo donde residan , el problema no está en el entorno sino en el corazón de las personas ".